Etiquetas

meditación (12) Krishnamurti (7) oración (6) advaita (5) Dios (4) Ejercicios de contemplación (4) Franz Jalics (4) Jesucristo (4) Ken Wilber (4) Klein (4) búsqueda espiritual (4) el trabajo interior (4) libros espirituales (4) Blay (3) Contacto con Dios (3) Dios habla en la soledad (3) Maestro tibetano (3) Nisargadatta (3) de Mello (3) materialismo espiritual (3) mis libros espirituales (3) presencia (3) testigo (3) Agni yoga (2) Bailando con la vida (2) El conocimiento de uno mismo (2) Hermano Esteban de Emaús (2) Oración del nombre (2) Oración del nombre de Jesús (2) Phillipp Moffitt (2) VBA (2) Vía directa (2) alma (2) antakarana (2) busqueda espiritual (2) centro magnético (2) contemplación (2) entrega (2) integración cuerpo-mente (2) madurez (2) mente inconsciente (2) Adyashanti (1) Annie Marquier (1) Budismo y Cristianismo (1) Cargar tu cruz (1) Chogyam Trungpa (1) Decálogo (1) El buscador en las fauces del tigre (1) El final de tu mundo (1) El maestro del corazón (1) El santo nombre (1) Enrique Martinez Lozano (1) Francis Lucille (1) Hara (1) Iniciación (1) Karlfried Durckheim (1) Kornfield (1) La Cova (1) La habitación del ego (1) La oración de Jesús (1) MT (1) Mariana Caplan (1) Padre nuestro (1) Peter Yang (1) Primera Noble Verdad (1) Quietud corporal (1) Raphael (1) Rincón del silencio (1) SER (1) Samkara (1) Silencio (1) Simone Weil (1) Tai chi zen (1) Tony de Mello (1) Traleg Rinpoche (1) Xavier Melloni (1) Yo soy eso (1) aburrimiento (1) aceptación (1) aceptación vs resignación (1) angel solar (1) autoria personal (1) biografía de K por Papul Jayakar (1) buscar a Dios (1) carácter (1) chakras (1) conocer a Dios (1) despertar (1) despertar espiritual (1) disposición al sufrimiento (1) el corazón y Dios (1) el devoto codicioso (1) emociones conflictivas (1) entrega a Dios (1) escucha (1) espiritual dad integral (1) espiritualidad integral (1) evolución espiritual (1) hesicastas (1) humildad (1) iluminación (1) la fe y la razón (1) la perspectiva correcta (1) la rueda de molino (1) la sombra (1) la verdad (1) luz (1) mantra (1) mirada inocente (1) morador en el umbral (1) oración de Jesús (1) oración de bienvenida (1) oración de petición (1) presente (1) práctica vital integral (1) punto fijo (1) respiración (1) silencio interior (1) sombra (1) trabajo interior (1) unificación interior (1) voluntad divina (1) ángel de la presencia (1)

sábado, 15 de febrero de 2014

TAI CHI ZEN: respirar y mover ORANDO



Esta entrada quiere abundar en el papel principal que la Respiración tiene en esta asignatura que es la espiritualidad. Si para aprobar un examen hay que estudiar mucho y vamos a utilizar la memoria, para aprobar un curso de este camino hacia el SER hay dos requisitos centrales, el primero es tener una intención y un esfuerzo sólidos y mantenidos en el tiempo  y el segundo es  RESPIRAR.
La respiración es el vehículo que conecta la mente con el cuerpo y la consciencia con la vida.
Es cierto  que se puede respirar sentado o haciendo ejercicios de yoga o chi kung y que por tanto el tai chi no es necesario. No obstante, he experimentado que el movimiento ayuda mucho a que esa respiración vaya impregnando todo el cuerpo, vaya abriendo lentamente las nueve puertas de las que hablan los orientales para la conquista del ser energético.
A través del movimiento y la respiración conseguiremos enraizar y abrir las puertas. A poco que tengamos sentimiento religioso, esta danza sagrada se convertirá en una ofrenda y en  una oración que atraerá  la atención del alma, o lo que es lo mismo, de Jesucristo. Recordar que la consciencia es universal, que todas las almas son Una y que por esto todos somos uno en Cristo. Ese contacto con Jesucristo  infundirá energía de una vibración muy superior al hombre integrado. Esto es, amigos míos, el alfa y el omega de la vida espiritual.
Jesús salva y redime la materia  a través de la GRACIA divina que es la incorporación de energía del cielo a la tierra. Pero para que esta alquimia sagrada ocurra, la tierra debe estar preparada. El mecanismo del hombre debe estar enraizado (toma de tierra de cualquier circuito eléctrico) , abierto, coherente e integrado. Si no se produce esta apertura e integración, Cristo  nos purificará y renovará, pero esa energía no se quedará en el sistema y sus efectos no perdurarán.
A continuación en negrita intentaré expresar lo que se siente con esta oración en movimiento que es el Tai Chi:

Cada inspiración nos llena de luz, nos llena de Cristo. Cuando el movimiento sube inspiramos y nos llenamos de amor, cuando el movimiento baja espiramos, nos vaciamos en Jesús, le entregamos nuestras tensiones y sufrimientos, nos enganchamos al suelo echando raíces para que el árbol no pueda ser derribado por el viento. Cada ciclo respiratorio es una oportunidad nueva y única para entrar en el aquí y ahora EN ACCION DE GRACIAS. Gracias Señor por el cuerpo que me has prestado, por el aire que respiro y que Tú regalas, por la suavidad del movimiento en el que a veces casi Te acaricio, por la oportunidad de estar en ese espacio bendecido por Ti, compartiendo con otros.  Siempre me viene a la memoria "allí donde hay dos reunidos en mi nombre, allí estoy YO". Mientras la Forma del Tai Chi se va desarrollando te vas abriendo al SER y todo el movimiento se convierte en una celebración. Bum-bum, bum-bum, bum-bum... vas escuchando como late el SER, las lágrimas caen por tus mejillas, vuelves a dar las gracias y todo tú te postrarías en el suelo para ADORAR AL SEÑOR.

Si Señor, Gracias Señor, Que sea Tu voluntad.

El resumen, es el respirar - transpirar - conspirar de Peter Yang. A través de la respiración llevamos consciencia al sistema energético físico que cuando está coherente y abierto empieza a transpirar, es decir a expandir y comunicar esa consciencia Crística a los demás, lo que lleva a conspirar que es la unión de los seres humanos a través de las respiración  (Uno en Cristo).
Para todo ello, hay que empezar allí donde estas, no donde te gustaría estar. Esto es ser consciente del aquí y ahora a través de la respiración. Expandir esta consciencia a todas las áreas de la vida.

Dos notas adicionales:

1- GONGFU:  El secreto de la Flor Dorada dice: "No pierdas el tiempo, practica diligentemente. Un día sin practicar y eres un fantasma ese día; si practicas durante un simple aliento entonces, te conviertes en inmortal durante ese aliento".

2- "La integración mente-cuerpo es fundamental para avanzar en el sendero: esto es la sensación sentida de estar presente en el cuerpo. El desarrollo de prácticas dirigidas a ello permitirá llevar la conciencia al cuerpo y conocer y deshacer los nudos de tensión que allí se han alojado y desarrollado durante décadas.
En la importante enseñanza Budista de los cuatro fundamentos de la  Atención plena, la consciencia corporal es una característica central:
"Existe una cosa, oh,  monjes,  que cultivada practicada  con regularidad conduce a una profunda sensación de urgencia..., a la Paz suprema, a la atención plena y a la clara comprensión...,  a la realización de la recta visión y del recto conocimiento..., a la felicidad aquí y ahora..., a realizar la liberación a traves de la sabiduría y de la santidad: es la CONSCIENCIA DEL CUERPO".


Bibliografía:
- Bailando con la vida : intuiciones budistas para hallar sentido y alegría frente el sufrimiento por Phillip Moffitt (libro altamente recomendado; un tesoro).
-Chi kung cristiano por Peter Yang y Jose M Prat.



No hay comentarios: